domingo, 5 de mayo de 2013

EL SALARIO UNIVERSAL Y LA NORMALIZACION CIUDADANA


No habrá jamás trabajo para todos. Mas de la mitad de la población mundial no tendrá trabajo y las diferencias sociales son en la práctica, mayores que nunca.
Las luchas sociales ya no son entre ricos y pobres, sino, los que trabajan y los que no.  Los afortunados con trabajo y los que no lo tienen ni lo tendrán. El capitalismo brutal nos trajo lo que muchos nos advirtieron hace muchos años. La explotacion de todo cuanto nos rodea con el objeto de enriquecer a unos pocos, no ha tenido límites. La vivienda, la tierra y nuestro alimento, solo falta "arrancar" -en esta loca explotación- mas hijos a las madres en los nueve meses de gestación y así como a la tierra se le "arranca", forzándola con toda suerte de abonos, mas cosechas de la que puede sin el "descanso" que necesita, razón ésta, por la que nuestro alimento ha perdido su sabor y propiedades; las mujeres podrán embarazarse varias veces en el mismo periodo de nueve meses.
La derecha ultraconservadora ya nos viene preparando para dicha explotación con unas leyes antiabortistas en las que el sujeto -las mujeres- nada pueden hacer.
Un solo ordenador, ha dejado fuera de la actividad laboral entre dos y cuatro personas dependiendo de la complejidad de la tarea realizada.
Una máquina herramienta, brazo robotizado creado para producir a gran escala en esta siniestra reconversión industrial, ha dejado en el paro entre 8 a 30 personas que antes realizaban dicho trabajo de forma manual y artesanal.
Hoy, ninguna empresa e industria en el mundo, puede competir sin una gran producción basada en Máquina Herramienta (Robótica).
Ante este desolador panorama laboral y social, nuestros políticos y nuestra clase dirigente no ha estado ni estará a las alturas con las medidas que requiere la magnitud del problema creado por el sistema capitalista, liberal, conservador y explotador.
La solución, para la normalización de la vida ciudadana, no pasa por la asignación de ayudas a la banca, partícipe directo de los males de nuestra sociedad, sino, por la implantación de un Salario Universal para todos aquellos que no tienen y no tendrán trabajo, fruto del desarrollo tecnológico e industrial.
Crear confianza, -como dicen algunos políticos- no es endeudarnos con préstamos para enriquecer a la banca, sino, hacer llegar la "sensación" de seguridad social y que ninguna persona esté sola y desprotegida tal y como ocurre con nuestra población en total abandono.
Para la creación de un Salario Universal basta con "recortar" puestos de trabajo a políticos, actualmente los auténticos especuladores e intermediarios, dejando a funcionarios expertos en economía y otras materias y que la administración requiere. (Cada gobierno, tras unas elecciones, se dota de un equipo de expertos) La aplicación de un Impuesto a nuevas tecnologías por cada desempleado ocasionado por éstas..
La Política y las Fuerzas Armadas son, en el siglo XXI, actividades en desuso que pertenecen al pasado como el oficio de herrero en una Herrería.

Mikel Fuentealba Iribarne